“Educación de Calidad para todos”
Misión
Brindar una educación de calidad en los niveles preescolar, primaria y secundaria, impulsando el desarrollo integral de nuestros estudiantes en lo intelectual, social, emocional y motriz. Buscamos que crezcan en un ambiente natural, feliz y amoroso, preparándolos para enfrentar con éxito los retos del mundo, con el respaldo y compromiso de toda nuestra comunidad educativa.
Visión
Ser un colegio reconocido por su alto nivel educativo y formación integral, que atiende a estudiantes de preescolar, primaria y secundaria del nivel socioeconómico medio-bajo, contribuyendo activamente al desarrollo cultural, social y formativo de nuestra comunidad.
Filosofía
El Colegio Miguel Ángel se distingue por su ideario y filosofía, que tienen como base la oportunidad de ofrecer a todos los niños una educación de calidad. Creemos en el desarrollo integral de cada estudiante, fomentando sentimientos de calidez humana, felicidad y un acercamiento respetuoso a la naturaleza. Nuestro enfoque está centrado en el amor y el compromiso con el crecimiento de cada niño. Adoptamos una pedagogía ecléctica, que combina los principios del Humanismo y el Constructivismo, para crear un ambiente educativo enriquecedor y personal.
Valores
Los valores son principios y actitudes que guían nuestra vida, siendo esenciales para fomentar una convivencia armoniosa y respetuosa entre alumnos y profesores dentro de la comunidad escolar.
Como educadores, nos comprometemos a ayudar a niños, jóvenes y adolescentes a fortalecer sus propios valores a través de nuestras acciones educativas. Una de las claves de este proceso es que el educador debe ser un modelo a seguir, y el aula debe ser una comunidad orientada al óptimo desarrollo de las actitudes y la formación integral de los estudiantes.
En este enfoque, es fundamental que tanto la familia como la comunidad participen activamente en la educación en valores. Además, el docente debe aprovechar situaciones reales en clase para promover dinámicas grupales que favorezcan la resolución de conflictos, el esclarecimiento de problemas y la disolución de presiones, contribuyendo así a la armonía, el autoconocimiento y el enriquecimiento de experiencias dentro y fuera del aula.